De la Universidad a la Oficina: Por Qué tu Imagen Profesional es tu Mejor CV

Al trabajar muchos años en el medio financiero, vi cómo las empresas contrataban a jóvenes que aún estaban en la universidad. No se esperaba que tuvieran experiencia, pero sí actitud, ganas de aprender y compromiso para empezar una carrera. La gran pregunta es: ¿quiénes se quedan y quiénes no?

Aunque a menudo parece injusto que los recién graduados no encuentren empleo por falta de experiencia, la realidad es que el factor diferenciador va más allá de tu currículum. La imagen profesional es la clave para demostrar tu valor.

La Anécdota que Nos Enseña una Lección Invaluable

Un colega contrató a un universitario que venía recomendado por un familiar, sin pasar por el proceso de selección normal. El joven no duró ni dos meses en la empresa. Su apariencia física reflejaba desorden y su actitud no mostraba interés en sus asignaciones. Cuando le pedían algo, contestaba con lentitud y se distraía en otras cosas.

Las exigencias comenzaron a ser mayores y, en lugar de pedir ayuda o intentar resolver las cosas, decidió renunciar. No le dio el beneficio a su jefe de entender cómo resolver las cosas y prefirió irse, cerrando una puerta de forma prematura.

Las Claves para Proyectar una Imagen Profesional Sólida

Si estás en la universidad y quieres adquirir experiencia laboral, es importante que tu imagen profesional demuestre que eres responsable y tienes credibilidad.

• Apariencia y Vestimenta: Para hombres, un peinado bien arreglado, un traje y corbata sencillos. Para mujeres, un atuendo serio y no demasiado casual. Tu forma de vestir refleja la seriedad que le das al trabajo.

• Lenguaje Verbal y No Verbal: En una entrevista, mantén una buena postura. Escucha antes de hablar y elige bien tus palabras. Evita el vocabulario inapropiado, incluso si eres joven, ya que puede reflejar una falta de seriedad.

• Actitud Positiva: Una buena actitud es tu mayor activo. Las personas quieren trabajar con gente enérgica, dispuesta a aprender y a resolver problemas. Si demuestras entusiasmo y responsabilidad, te convertirás en un activo valioso para cualquier equipo.

Si tus clases no te permiten trabajar al mismo tiempo, es mejor no comprometerte, porque tu imagen profesional puede verse afectada, y no querrás cerrarte puertas a futuras oportunidades. Proyectar seriedad, responsabilidad y habilidad para resolver situaciones es la mejor forma de asegurar un camino al éxito.

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